CONFIRMACIÓN
La Gracia de la Confirmación
La Confirmación perfecciona la gracia bautismal; es el sacramento que da el Espíritu Santo para enraizarnos más profundamente en la filiación divina, incorporarnos más firmemente a Cristo, hacer más sólido nuestro vínculo con la Iglesia, asociarnos todavía más a su misión y ayudarnos a dar testimonio de la fe cristiana por la palabra acompañada de las obras.
La Confirmación aumenta en nosotros los Dones del Espíritu Santo recibidos en el Bautismo (Sabiduría, Inteligencia, Consejo, Fortaleza, Conocimiento, Piedad y Temor de Dios). Nos concede la fuerza especial del Espíritu Santo para difundir y defender la fe mediante la palabra y las obras como verdaderos testigos de Cristo.
Los signos de la Confirmación
El Sacramento de la Confirmación se inicia con la renovación de las promesas del Bautismo y la profesión de fe. Luego el obispo confiere la Unción del Santo Crisma (óleo perfumado) en la frente, imponiendo la mano y pronunciando estas palabras: "Recibe por esta señal el don del Espíritu Santo”.
Este sello del Espíritu Santo marca la pertenencia total a Cristo, la puesta a su servicio para siempre, pero indica también la promesa de la protección divina.
La unción posee numerosas significaciones: El aceite es signo de abundancia y de alegría; purifica y da agilidad; es signo de curación; el ungido irradia belleza, santidad y fuerza. ”Cristiano" significa "ungido" y tiene su origen en el nombre de Cristo, al que "Dios ungió con el Espíritu Santo.”
Preguntas frecuentes
¿Cómo me inscribo para recibir el Sacramento de la Confirmación?
Si tenés más de 15 años y querés recibir el sacramento de la Confirmación, podés anotarte en la secretaría parroquial a partir de Junio. La preparación se realiza todos los años, dura un año y comienza en Agosto. Los encuentros son una vez por semana; además, se realiza un campamento y un retiro espiritual.
¿En qué consiste la catequesis para Confirmación?
La catequesis para Confirmación tiene como meta conducir al cristiano a una unión más íntima con Cristo, a una familiaridad más viva con el Espíritu Santo, su acción, sus dones y sus llamadas, a fin de poder asumir mejor las responsabilidades apostólicas de la vida cristiana. Se esfuerza por suscitar el sentido de la pertenencia a la Iglesia de Jesucristo, tanto a la Iglesia universal como a la comunidad parroquial.
¿Cómo puedo prepararme para la Confirmación?
Para recibir la Confirmación es preciso hallarse en estado de gracia. Conviene recurrir al sacramento de la Reconciliación y prepararse mediante la oración para recibir con docilidad y disponibilidad la fuerza y las gracias del Espíritu Santo.
¿Quién administra el Sacramento de la Confirmación?
El ministro ordinario de la Confirmación es el obispo.
¿Se administra una sola vez?
La Confirmación, como el Bautismo, imprime en el alma del cristiano un signo espiritual o carácter indeleble; por eso este sacramento sólo se recibe una vez en la vida.
¿Qué rol cumple el padrino o madrina de Confirmación?
Para la Confirmación, como para el Bautismo, conviene que los candidatos busquen la ayuda espiritual de un padrino o de una madrina. Conviene que sea el mismo que para el Bautismo a fin de subrayar la unidad entre los dos sacramentos, pero puede ser otra persona. El rol del padrino o madrina es ayudar al confirmado a cumplir las promesas hechas en el Bautismo y acompañarlo en su vida de fe.